martes, 25 de septiembre de 2012

30.- Retroceder nunca.


Yo me asumo como una persona terca, necia y orgullosa; pero debo reconocer que cuando era más joven y por lo tanto  mucho más inmadura era insensatamente terca, extremadamente necia y asquerosamente orgullosa, afortunadamente el tiempo y la vida me ayudaron de sobremanera a pulir un poco, esas esquinas rasposas que tenía mi ser, y me ayudo a disminuir en miles y miles de toneladas mi genio de basurero público de avenida principal. Sin embargo, esta semana me encontré,  por medio de una de las numerosas redes sociales, a una de mis compañeras del colegio, con la que recordaba en mi más dulce juventud, haber sostenido una relación amical, o bueno pues recordaba que en un tiempo habíamos sido patas, chocheras, causitas; pero no podía entender porque hacía hace tanto tiempo que no sabía nada de ella si en un buen tiempo nos llevábamos bastante bien; de repente recordé que había pasado algo que me había hecho alejarme de ella, algo que para mí a mis “profundos” 15 años había sido totalmente imperdonable, algo mortal, casi casi algo merecedor de la silla eléctrica, de la excomunión, o de la expulsión del país; algo como que soltó algún chisme de mi, o que también le gustaba el mismo chico que a mi, o que no me había invitado a su 15, o algo por el estilo, pero lo importante era que decidí alejarme de ella, y desde entonces ( cerca de 10 años, no le dirigía la palabra por ese gusto!),a los 15 pensaba que era algo vital, y ahora no podía recordar cuál había sido el motivo por el que me había peleado con ella, realmente deprimente. Pero eso del orgullo es algo que le pasa a millones de personas, pero hay otros millones a los que les pasa todo lo contrario, hay gente que tiene definitivamente alma de trapeador!, es increíble las veces que pueden soportar tratos tan terribles, pero eso lo detallare más adelante; volviendo a lo del orgullo, hay muchos casos interesantes, como por ejemplo: El que nunca se equivoca, nunca de los nuncas, comete un error, y ni siquiera el día que lo comete es capaz de reconocerlo, busca una y mil formas de hacer pasar a su error como un acierto, NO! YO NO ME EQUIVOQUE, LO QUE PASA ES QUE ME DIJIERON MAL LAS COSAS A MI, YO LO HICE COMO ME PIDIERON, ENTONCES ES CULPA DE OTRA PERSONA, NO MÍA!, ni siquiera cuando tu les demuestras y por lo tanto ellos saben de sobra que lo que hicieron esta mal, lo reconocen; particularmente yo conozco personas, que han metido la pata más al fondo de embriague de volswagen del 76, sin embargo desde que las conozco, nunca ha salido de sus bocas, una frase que reconozca que están equivocados, sencillamente esperan que pase el tiempo para que la gente se olvide de lo que paso, y seguir adelante con su vida, TERRIBLES!, además de eso, muchos son de lo más terco que he conocido en este continente, NO! YO NO HE HECHO ESO, NO! YO NO LO ROMPÍ, NO! YO NO LO FIRME!, NO! NO ERA YO, ERA UN TIPO IGUALITO A MI!, NO! YO NO COGÍ TUS ZAPATOS, NO! YO NO ME GASTÉ EL SALDO DE TU CELULAR…NO, NO , NO Y NO!, y como para cerrar con broche de oro  y para reforzar tu postura de tener la razón, y procurar con eso convencerte de que tu estás loca, que estas delirando, y que no hicieron aquello de lo que los culpas, Se Enojan! Te retiran la palabra por un tiempo, y se muestras profundamente indignados en tu presencia, como si les hubieras proferido el peor de los insultos, como si les hubieras atravesado una lanza por el costado, como si los hubieras maltratado como a alfombra sucia, se ofenden de tal forma, que sería total y completamente merecedor de un premio de la academia, de no saber que no es una actuación, si no la más pura e hilarante realidad, se la creen tanto, que están inmensamente seguros que su verdad, es la única y absoluta, nuevamente el tiempo es el único capaz de hacer que su herida, causado por tu desconfianza cruel; pueda cerrar, y particularmente ante estos casos yo siempre me pregunto…en que parte de la historia me quede?, porque al termino de todo, nunca comprendo en qué momento paso de ser la victima a victimaria, es el típico caso de la persona que termina pidiendo disculpas: LO SIENTO CREO QUE MI CARA GOLPEÓ TU PUÑO SIN QUERER, LO SIENTO MUCHO DE VERDAD! Otro de los casos comunes, es la peleíta de enamorados, muchas veces por una tontería, como POR QUÉ NO ME HAS CONTESTADO EL CELULAR, o POR QUÉ TODAVÍA NO HAS BORRADO DE TUS CONTACTOS A TU EX, o POR QUÉ NO ME QUIERES LLEVAR A TU CASA A CONOCER A TUS PAPÁS, o POR QUE NO ME DEDICAS TANTO TIEMPO COMO A TUS AMIGOTES, etc, etc; y claro después de una pelea muy digna de novela, o de final de temporada de serie, cada uno se va por su lado; sin mirar para atrás, porque el que voltea a ver al otro, es porque esta flaqueando; pues bien, llegan a sus casas, se encierran a sus cuartos y lloran toda la noche abrazados a sus almohadas o al osito de peluche que se regalaron en su primer aniversario. A la mañana siguiente al encontrarse con su grupo de amigos, estás más frescos y lozanos que niñitos cuna, y con la completa certeza de que ellos tienen la razón y que no piensan ceder un solo poquito CLARO! Porque así se empieza, si uno cede un poquito ahora, se va a aprovechar siempre!(se dicen a ellos mismos para demostrarse lo acertados que son). Convierten al celular una extensión de sus manos, no lo sueltan ni un solo segundo y están cerciorándose cada dos segundos de que tenga efectivamente señal, están profundamente desesperados porque él o la, los llame, mueren de ganas por hablar con la otra persona, pero se niegan bajo toda forma  humana imaginable a efectuar ellos la llamada, pueden morir pensando que ellos tienen la completa razón, y cuando encuentran a alguno de sus  amigos que no les da la razón les dicen QUE, TU NO ERES MI AMIGO?PORQUE ESTAS DEL LADO DE LA OTRA, NO PARECE QUE FUERAS MI AMIGO SI NO ELLA; por lo tanto, cuando te preguntan TU QUE PIENSAS? Después de  haberte narrado los motivos que ocasionaron la pelea, tu solo tienes una opción de respuesta, tu solo puedes decir, SI PUES, TIENES RAZÓN, aunque por dentro estés con ganas de apretarle el cuello para ver si con eso podrías hacerlo reaccionar. Pero aunque lo intentes, la gente orgullosa y terca no cede jamás, sé de gente que se peleó con alguien en primaria por que le perdieron el color negro de su caja de colores, o porque no le quiso prestar el borrador; y hasta el día de hoy, hombre y mujeres hechos y derechos, no se dirigen la palabra, si bien es cierto muchos no recuerdan bien el motivo de la pela, hoy realizarían un trabajo con esa otra persona, porque no les parece una persona “digna de confianza”, POR UN COLOR NEGRO?. Además de eso he conocido hermanos que se pelean por motivos tan importantes como que se gastaron toda el agua caliente, o porque no les guardaron un pan en el desayuno, pasan meses de meses sin dirigirse la palabra, pueden vivir sin hablarse con total tranquilidad, hasta que por suerte olvidan por lo que se habían peleado, y lo pasan por alto. Yo asumo que he sido un monstruo orgulloso, y si! he perdido amistades por motivos tan importantes como lapiceros perdidos, o gomas terminadas; pero ahora de menos niña, quiero creer que la madurez me ha permitido limar mucha de las esquinas astillosas que tiene mi personalidad, aunque debo sincerarme y reconocer que aun no he encontrado una lija suficientemente fuerte para algunas cosas terribles, he podido pulir por lo menos algunas. Aun me cuesta mucho ceder frente a una pelea, y si! aun me puedo pasar algunos días sin llamar, esperando claro que me llamen, pero tengo plazos claros para mi, nunca más de una semana, si antes no me devuelven la llamada, es que para esa persona no soy tan importante como lo es la otra persona para mi, por lo tanto, no lo arranco con odio de mi; sino que le doy el espacio que está solicitando, y doy un paso a de su vida; ahora que si es de mi familia, en menos de 4 horas, estoy llamando al celular para conversar al respecto. Yo creo que todos tenemos un poco de orgullosos en nuestra personalidad, pero nunca tanto como para llegar a considerarnos los Infantes de España, merecedores de todo, y sin necesitar de nadie en el mundo; por lo menos lo necesario para hacernos respetar, inclusive por nosotros mismos; nunca tanto! Pues bien la bola está en su cancha, cada uno con su cuento, yo tengo que hacer un par de llamadas, antes de que se me pasen el tiempo, por lo demás…hablaos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario